Gracias Fidel.

La Habana, Cuba, agosto de 2010

Un maravilloso libro ha llegado nuevamente a mis manos, se trata de La Edad de Oro de José Martí, este ejemplar que me han donado, viene a mi familia en un momento realmente especial, Diego (mi hijo) acaba de cumplir 8 años y es la edad en que los padres tenemos el deber de ser guías y faro en la educación de nuestros retoños.

Este en particular tiene una dedicatoria del actualmente activo expresidente Fidel Castro, por lo que infiero, sea su deseo que leamos y analicemos profundamente la maravillosa obra del Maestro.

En el libro, en su primer pasaje, Tres Héroes, unos párrafos me llamaron la atención y los reflejare aquí íntegramente por su importancia educativa.

Hay hombres que viven contentos aunque vivan sin decoro. Hay otros que padecen como en agonía cuando ven que los hombres viven sin decoro a su alrededor. En el mundo ha de haber cierta cantidad de decoro, como ha de haber cierta cantidad de luz. Cuando hay muchos hombres sin decoro, hay siempre otros que tienen en sí el decoro de muchos hombres. Ésos son los que se rebelan con fuerza terrible contra los que le roban su libertad, que es robarle a los hombres su decoro. En esos hombres van miles de hombres, va un pueblo entero, va la dignidad humana. Esos hombres son sagrados

Los niños en esta edad preguntan todo, es la edad que he querido identificar como (y Por qué).

Después de leerle a Diego varios episodios medite sobre varias preguntas que constantemente me hacia, él no tiene la culpa de como piensa ó lo que hace su padre, por mi parte trato lo mas que puedo trasmitirle seguridad, confianza y amor.

Sin embargo compartiré algunas de sus últimas preguntas, las cuales me he visto obligado momentáneamente a evadir. El me ha preguntado por qué no trabajo, que por qué no lo recogen igual que a sus amiguitos, cuando va para la escuela, que por qué pasamos tanto trabajo para todo, que por qué no tenemos dinero nunca, que por qué no se puede comer lo que a uno le gusta, que por qué muchos vecinos me han dejado de hablar, que cuando podremos ir ha ver ha su hermana Yeimi que vive en Ciego de Avíla y no ve hace tres años, que cuando dejaremos de pasar tanto trabajo. Esas son algunas de las preguntas y yo qué no se mentir, me veo obligado por su edad de oro a evadir ó tergiversar, triste situación en la que me encuentro casi a diario, imagino que muchos padres como yo en Cuba se las verán difíciles ante los constante bombardeos de preguntas de nuestros niños.

Sé que algún día tendré la obligación de contar la verdad de mi vida a mis hijos, y que solo he ganado tiempo, para no mortificar sus sacrificadas é ingenuas vidas.

Pienso que muy pronto tendré que decirle que gracias a Fidel Castro, este maravilloso libro llego a todos los niños que terminan el sexto grado en Cuba.

Algún día tendré que decirle la verdad.

Que gracias a Fidel Castro y su policía secreta su papá no trabaja hace ya 10 años, que gracias a Fidel Castro los que pensamos diferentes no podemos reunirnos, que gracias a Fidel Castro los Cubanos no podemos viajar cuando queremos, que gracias a Fidel Castro todo el pueblo cubano ha perdido en algún modo su decoro, que gracias a Fidel Castro el pueblo cubano en su mayoría sueña con abandonar la isla, que gracias a Fidel Castro los cubanos nos hemos dividido y un gran por ciento a tenido que construir una ciudad en los Estados Unidos, que gracias a Fidel Castro los cubanos ni tenemos propiedad privada, que gracias a Fidel Castro los cubanos viven regados por el mundo, que gracias a Fidel Castro la mayoría del pueblo vive con miedos, que gracias a Fidel Castro no a conocido a su abuelo que vive en Estados Unidos, que gracias a Fidel Castro estos días no hemos podido estar juntos, pero sobre todo quisiera darle las gracias al hipócrita regalador de libros, por no haberme todavía separado por años de mi hijo y privado de mis mas lógicos, sinceros y humildes pensamientos patrióticos.

joisygarcia@gmail.com