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jueves, 24 de febrero de 2011

Zapata Vive.


La Habana, Cuba, febrero de 2011
Joisy García Martínez.

Morir por la patria es vivir.
Un aniversario se cumple de la muerte evitable y cruel del mártir Orlando Zapata Tamayo, fecha inolvidable que muchos cubanos tristemente recordaremos por el resto de nuestras vidas.

La madre del héroe Reina Luisa Tamayo seguramente querrá ir a la tumba de su hijo en Holguín, Banes, conocemos la represión existente y muchos compatriotas estaremos al tanto de lo que sucederá en tierras orientales.

El gobierno cubano al no ceder -sin dudas- correrá la misma suerte de las dictaduras comunistas que hace años imperaban en el Este de Europa, los cubanos terminaremos algún día disfrutando de los mismos derechos que hoy gozan millones de ciudadanos que vivieron bajo este telón de acero.

El afán de libertad bien sabemos que inquieta a los tiranos. Lo que mas temen las administraciones absolutistas es a miles de personas que desde lo mas profundo de su ser reclaman el derecho de decidir su propio destino. Personas que conocen que las armas más peligrosas y eficaces contra el totalitarismo son las ideas independientes, la dignidad y la defensa de los derechos individuales.

Gracias a las nuevas tecnologías Cuba no es mas una isla lejana o un problema de los Estados Unidos, Cuba es hoy mas que nunca de interés nacional e internacional y nuestra responsabilidad es ayudar a que no ocurran mas sufrimientos, golpizas y muertes, para poder instaurar un régimen de libertades, de esperanza, comprometido en no cometer los mismos errores.

La democracia sólo llegara a Cuba de la mano de nuestra firmeza colectiva y solo debemos estar conformes cuando los cubanos seamos realmente libres. Pido a las personas comprometidas con causas de injusticia u opresión en cualquier parte del mundo, que no olviden que en Cuba todavía hay personas en la cárcel por sencillamente pedir democracia, sólo por pensar diferente, sólo por sentir distinto.

Quisiera pensar en que todos queremos cambios, en que una patria mejor es posible. Los ciudadanos preocupados debemos estar atentos en estos días al oriente del país.


Ameno intercambio de ideas, sin prioridad nacional.



La Habana, Cuba, febrero de 2011
Joisy García Martínez.

Comienzo escribiendo este post frente al televisor, observo a intelectuales que han sido invitados a la 20a feria del libro en La Habana y están convidados a una charla con el ministro de cultura Abel Prieto y el primer secretario del Partido Comunista de Cuba y expresidente Fidel Castro, voluntariamente escucho la charla e increíblemente no he tomado ningún calmante o aplicado las imprescindibles técnicas yoga que aprendí de mi padre y aplico en ocasiones.

La presentación es hipócrita y todos les ríen las gracias al rey y a su erudito bufón de turno. Soy testigo de un cuadro que realmente da tristeza, las ideas que se discuten son interesantes, pero para los que no tienen que pensar en la cotidiana preocupación del desempleo, el vaso de leche en las mañanas, el transporte, la merienda escolar, el excesivo monto de los impuestos, la escasez de agua, los bajos salarios, el precio del aceite en la moneda de oro que no todos los cubanos tenemos o la libra de azúcar y arroz a sus nuevos precios de 8 y 5 pesos (casi la mitad del salario diario de un trabajador común).

La política del hambre.
Fidel se pregunta al comienzo, refiriéndose a algunos blog.
¿Por qué no hay una rebelión en Cuba como en Egipto?
Rápidamente salto de la silla, no me molesto, pero contesto sin mucho cavilar, en Cuba lo único que funciona bien es el aparato represivo que liderean él y su hermano hace mas de 53 años, muestra de ello son los todavía incalculables prisioneros políticos que sufren en las mazmorras del país, país que su gobierno todavía no permite a sus ciudadanos asociarse libremente, país en el cuál una madre no puede visitar libremente la tumba de su hijo en Banes, nación que su denominado Poder Popular no ha dado respuestas a peticiones ciudadanas, como es el caso de los planteamientos elevados por los “Voceros del Barrio” en Punta Brava y gobierno que hace poco forzó al destierro a valientes hijos que languidecían en las cárceles de la secuestrada patria.

Las arrolladoras manifestaciones en la Plaza Tahrir que terminaron con el derrocamiento del expresidente Hosni Mubarak en Egipto son un sueño -quizás no muy lejano pero ausente- del inerte y noble pueblo cubano.

Tenemos el deber de informarnos bien de todo- asegura Castro- y me vuelvo a preguntar, ¿cuándo tendremos Internet o acceso a correo electrónico en el joven club de computación de nuestra localidad en Punta Brava?
Sería agradable, moderno, civilizado, cómodo y ya lo pedimos algunos vecinos del barrio por los canales establecidos del mencionado Poder Popular, me evitarían los sacrificados viajes que hago y no me patrocina nadie a las gentiles embajadas que brindan este servicio a ciudadanos cubanos que queremos, lo que creemos un derecho elemental, informar e informarnos fuera del oficialismo que supuestamente representan los intereses de una mayoría y que le soslaya los derechos a una minoría cada vez mayor y menos invisible para todos en el mundo.

Al fin una frase con la que estoy de acuerdo, aunque me hubiera gustado la palabra ciudadanos.
“si logramos que los intelectuales comprendan el riesgo que estamos viviendo en este momento, en que la respuesta no se puede posponer, tal vez logren persuadir a las criaturas mas autosuficientes e incapaces que han existido nunca : nosotros, los políticos”

Ahora me vuelvo a preguntar, si los políticos son autosuficientes e incapaces, por qué el pueblo no los cambia cada determinado tiempo- la ley a mi entender debería contemplar este punto, como lo contemplaba la constitución del 40-, ya algunos en nuestro caso llevan en la ingrata y sacrificada profesión más de 53 años, las generaciones jóvenes supongo no están totalmente dormidas y seguramente tendrán ideas renovadoras e incluyentes que exponer en el contexto nacional. Lo difícil del cuadro nuestro es lograr persuadir al vejestorio de políticos que nos tratan de gobernar, a jubilarse en sus modestas mansiones de humildes y para los humildes.

La próxima feria del libro en La Habana debería dedicarse a los incalculables y magníficos escritores e intelectuales de la diáspora cubana y entre todos hacer un llamado a la diversidad de contrapuestas opiniones existentes entre los cubanos y que en mi entender hacen a una sociedad mejor, viva y funcional.

En fin, no voy a seguir machucándome con este ameno intercambio de ideas sin prioridad nacional, que para los que buscaremos para mañana la merienda escolar de nuestros hijos, no nos reporta absolutamente nada nuevo.
El sistema continúa sin funcionar para ustedes, los nosotros mismos.

joisygarcia@gmail.com

«Cuba se adentra en una tierra de nadie, ni capitalista ni comunista, sino todo lo contrario»

Vicente Botín: «Cuba se adentra en una tierra de nadie, ni capitalista ni comunista, sino todo lo contrario»
07-02-2011 - 12:08 am.
Vicente Botín

Vicente Botín, corresponsal de la Televisión Española en Cuba entre 2005 y 2008, y autor de los libros Los funerales de Castro y Raúl Castro: La pulga que cabalgó el tigre, responde a las preguntas de los lectores de DIARIO DE CUBA
Ricardo E. Trelles: Muchas gracias por su interés por Cuba y por la claridad de sus interpretaciones sobre el problema social cubano. Aprovecho este contacto para destacar la enorme importancia que tiene la entrevista que usted hizo a Fidel Castro en 1984. Esa entrevista demuestra la mentalidad de fantasía de ese señor y el rotundo fracaso que ha sido el régimen que impuso a Cuba. Creo que sería muy útil para Cuba darle la mayor difusión posible a esa entrevista, fuera pero, sobre todo, dentro de Cuba. Sé que la misma puede ser vista en el sitio de TVE, pero quisiera pedirle a usted que, si es que está entre sus posibilidades, promoviera la reproducción de la misma en varios medios para facilitar su copia y redistribución. Espero noticias respecto a mi petición aquí en DDC. Muchas gracias.
Gracias por sus comentarios, Ricardo. Los derechos de la entrevista a Fidel Castro los tiene Televisión Española y se puede ver a través de la página web de la cadena. Desgraciadamente yo no tengo acceso a ese material. Por otra parte, las entrevistas o programas de carácter histórico se suelen emitir nuevamente en aniversarios o en ocasiones especiales (¿quizás cuando muera Castro?), aunque sería bueno ver el contraste entre aquel dictador anclado ya fuera del tiempo y el actual anciano delirante que anuncia el Apocalipsis.
Jesus Roque: El trabajo de un periodista es seguir la noticia y sobre todo preguntar. ¿Si tuvieras de frente a Fidel Castro le preguntarías cuando piensa retirarse a su casa en Punto Cero y dejar de meter las narices en los asuntos del país? ¿Existe alguna forma de taponarle la boca a ese viejo para que no hable mas sandeces?
 Fidel Castro está retirado ya en su casa de Punto Cero tomando las sopitas que le prepara su mujer, Dalia Soto del Valle. "Mete las narices" (por utilizar su expresión) en los problemas del mundo, porque ya no puede meterlas en Cuba. Su hermano se ha dado a la tarea de "desfidelizar" la revolución para intentar salvarla (de sí misma), y ha convocado el VI Congreso del Partido Comunista de Cuba, después de haberlo aplazado sine die, para avalar esas "reformas" que Fidel Castro, si estuviera en sus cabales, torpedearía, como hizo con muchas de las medidas que su hermano puso en marcha durante el "Período Especial". No hace falta repetir las descalificaciones de Fidel Castro hacia los "merolicos" que ahora, según las nuevas normas, van a poder contratar incluso mano de obra cubana.  
Alain: ¿Puede contarnos si al comienzo de su trabajo como corresponsal en Cuba tuvo algun tipo de reunión donde funcionarios cubanos le informaran de las condiciones a su trabajo y cuales eran éstas?
Las normas para el trabajo de los corresponsales extranjeros en Cuba están especificadas en el "Reglamento de la Prensa Extranjera en Cuba", una Resolución del Ministerio de Relaciones Exteriores, de 1997, actualizada en octubre de 2006, durante la enfermedad de Fidel Castro, para reforzar los ya de por si estrictos controles gubernamentales sobre la prensa extranjera.
Esa norma es una auténtica espada de Damocles, ya que es lo suficientemente ambigua como para expulsar del país a cualquier profesional que "no se ajuste a la objetividad en sus despachos", según la Resolución. Porque, ¿quien decide que una noticia es o no es objetiva? Naturalmente, el Gobierno.
Durante mi estancia en Cuba, tres colegas, los corresponsales de la BBC de Londres, The Chicago Tribune y El Universal de México, fueron expulsados de Cuba, sin más explicación que su "falta de objetividad", sin ningún tipo de argumento para justificar esa supuesta falta de objetividad. En definitiva, los corresponsales siempre están en la cuerda floja porque no hay unas reglas claras, como en la pelota, para jugar el partido. Si son molestos, se les advierte y si son demasiado molestos, se les expulsa del país, aunque lo que "legalmente" se les diga es que no se les renueva su acreditación.  
Libertad: Sólo quería agradecerle de corazón los libros que sinceramente escribió, y que nos sirve de vocero a los cubanos y cubanas que tanto y tanto hemos estado sufriendo por ese régimen, y que hemos perdido a nuestros seres más queridos, como madre y padre, por culpa de esa dictadura asesina. Todo mi afecto para usted. Gracias, de corazón.
Muchas gracias, Libertad. ¡Que bonito nombre! Llamarse así en Cuba es una auténtica contradicción. Le regalo esta frase, que usted sin duda conocerá, de Don Quijote: "La libertad, Sancho, es uno de los más preciosos dones que a los hombres dieron los cielos; con ella no pueden igualarse los tesoros que encierran la tierra y el mar: por la libertad, así como por la honra, se puede y debe aventurar la vida".
El Lapón Libre: Fui periodista oficialista en Cuba y al irme de la Isla, recuerdo muy bien que cuando miraba sus reportes desde Cuba a través de la RTE Internacional, muy pocas veces vi en sus noticias algo de crítica fuerte hacia el régimen y, como casi todos los corresponsales extranjeros en la isla, vivía disfrutando las fiestas y prebendas turísticas que el gobierno les ofrece a cambio de su no crítica directa al sistema. Sin embargo, cuando terminó su servicio, se aparece usted en España con esos dos libros hiprecriticistas ¿Oportunismo o simulación para no levantar sospechas en sus investigaciones?
Un periodista acostumbrado a trabajar en un país democrático se encuentra perdido al llegar a Cuba. No hay fuentes para obtener información, salvo las oficiales, y no hay unas reglas de juego claras. Si ese periodista es honesto tratará de buscar fuentes de información alternativas para conocer la verdadera realidad del país. Ahora bien, una vez obtenida esa información, se enfrenta a un dilema: ¿hasta dónde puedo llegar para dar a conocer la verdad? ¿La cuento como la contaría en mi país, exponiéndome a la expulsión, o la cuento de una manera más "suave" pero lo suficientemente clara para que se sepa lo que está ocurriendo? En definitiva, ¿qué es mejor? ¿Que no haya periodistas extranjeros en Cuba o que los que hay informen de lo que puedan aún con cortapisas, exponiéndose a que les acusen de "oportunistas" e incluso de "vivir disfrutando las fiestas y prebendas turísticas que el gobierno les ofrece…", como dice usted?
Pablo Ávila:  Todos estamos de acuerdo en que para ser un periodista acreditado en Cuba tienes que hacer lo que le de la gana al gobierno de Cuba. ¿Cómo se mantuvo tanto tiempo trabajando en Cuba, si supuestamente usted es un hobre honesto y sólo reporta la verdad? De las veces que hizo lo que le exigió el gobierno cubano, ¿de cuál se arrepiente más? ¿A cuántos cubanos entregó al gobierno cuando  al Gobierno de Cuba cuando llegaron a sus oídos noticias de que éstos hacían cosas que se les tenía prohibidas? ¿Qué le conoce a usted el gobierno de Cuba?
No comparto la idea, ni "todos" están de acuerdo, a pesar de lo que usted dice, de que para ser un periodista acreditado en Cuba hay que hacer lo que le da la gana al gobierno. El gobierno nunca me exigió nada; se limitó a vigilarme, a advertirme y a amenazarme ante el enfoque de determinadas informaciones. No sé si entiendo bien lo que me dice sobre si "entregué" a algunas personas al gobierno cubano. Me parece, por decirlo en plan castizo, que usted se ha pasado siete pueblos. El exilio es muy duro, no cabe duda, y en algunas personas puede provocar alucinaciones.  
Néstor: Me gustaria que me explicaras qué métodos utiliza la dictadura para silenciar a la prensa extranjera, cómo es posible que, viniendo de un pais democrático, os déjeis silenciar de ese modo. ¿Entrevistaste alguna vez al asesisno Fidel Castro? Pd: alguna vez leí una entrevista tuya en el Diario de Burgos (¿me equivoco?)... ¿es que acaso eres burgalés?
Ya expliqué anteriormente las cortapisas que tiene la prensa extranjera en Cuba y el dilema al que se enfrentan los corresponsales para poder informar y evitar ser expulsados del país. En mi larga entrevista con Fidel Castro en 1984 me impresionó lo lejos que estaba de la realidad (casi tanto como ahora) y su negativa a aceptar lo obvio. Le puedo contar como anécdota que cuando se explayó sobre el "hombre nuevo" yo le dije si incluía también a los "jineteros" y "jineteras" que desde el cine Yara vigilaban la salida de turistas del hotel Habana Libre (entonces mucho menos numerosos que ahora) para ofrecer sus "servicios", a cambio de productos importados de la tienda del hotel, como perfumes y otras cosas, porque eran pocos los que entonces cobraban dinero y preferían el pago "en especie", no como ahora. Fidel Castro negó rotundamente que eso ocurriera.
Sí, soy burgalés de pura cepa. Educado en el colegio de los Hermanos Maristas y amante de la morcilla y del cordero lechal.
Hernan Perez: ¿Nos pudiera contar una anécdota en que las hordas castristas hayan interrumpido su labor como periodista y corresponsal?
 En una ocasión nos detuvo la policía, cuando tratábamos de grabar con la cámara una operación para confiscar antenas parabólicas, prohibidas por el gobierno, cerca de la casa de Elizardo Sánchez, presidente de la Comisión Cubana de Derechos Humanos y Reconciliación Nacional.
Otra vez nos impidieron grabar imágenes de un control de la policía en el puente de Bacunayagua, donde obligaban a todos los pasajeros a salir de los coches para su fumigación, porque había una epidemia (no reconocida) de dengue.
Creo que basta con esos dos botones de muestra.
Ernesto Gutiérrez Tamargo: Ante todo, felicitarte por tus dos libros, el primero Los funerales de Castro, en mi opinión, probablemente el mejor libro sobre la revolución, el poder, la sociología-económica y los Castro en Cuba escrito por un no-cubano, y, el segundo, La pulga que cabalgó al tigre, un retrato exquisito sobre el "enigmático" Raúl Castro y el futuro de la Isla con esta dinastía. ¿Eres también persona non grata para las autoridades cubanas por haber escrito estos "libros críticos"? ¿Crees que es posible una transición cubana similar a la española una vez que muera Fidel Castro?  O dicho de otro modo, ¿es Raúl Castro un reformista o un rupturista? ¿Ves en el sexto congreso del PCC un avance de reformas (lineamientos) a un proceso económico que implique dinamitar el sistema político a medio-largo plazo?
 Querido Ernesto, eres demasiado generoso conmigo. Gracias una vez más. Al gobierno cubano no le han gustado mis libros, lo sé por comentarios que han hecho a alguno de mis colegas en el Centro de Prensa Internacional, el organismo del Ministerio de Relaciones Exteriores que da las acreditaciones a los periodistas extranjeros para trabajar en la isla. Nunca me han declarado, al menos oficialmente, persona non grata, pero sé que no puedo regresar a Cuba hasta que no desaparezca la dictadura.
No creo que en Cuba pueda haber una transición parecida a la española porque cuando murió Franco, en España había una oposición articulada, con partidos políticos clandestinos aunque muy fuertes (Partido Comunista y Partido Socialista, principalmente)  y sindicatos democráticos también ilegales (Comisiones Obreras y Unión General de Trabajadores) con una afiliación muy alta en todo el país. Había, además, una fuerte corriente democrática en el país, en la prensa, la empresa, la iglesia, la universidad…
Franco se despidió de este mundo con cinco muertos, pero todo el país estaba en la calle con huelgas y manifestaciones exigiendo democracia y libertad. Creo que en Cuba la oposición es débil porque la represión es muy fuerte y han condenado a los cubanos a la mera supervivencia. Cuando se tiene el estómago vacío, la primera tarea es "resolver" la comida. La exigencia de libertades pasa a un segundo plano.
Raúl Castro es un don nadie, una sombra de su hermano, no tiene carisma, pero es inteligente y sabe, como el Gatopardo, que "para que todo siga igual es necesario que todo cambie".
Neutralizado Fidel, el VI Congreso del PCC va a rubricar la "desfidelización" de la revolución cubana.   
Jorge Macías: ¿Qué opinion te merece la jerarquía de la Iglesia Católica en Cuba y su papel "mediador" en el tema de los presos politicos? ¿Tuviste la oportunidad de hablar o entrevistar al cardenal Ortega o alguno de los obispos cubanos?
El jefe de la Sección de Intereses de Estados Unidos en Cuba, Jonathan Farrar, según han revelado los cables aparecidos en Wikileaks, afirma que la Iglesia católica cubana ha capitulado frente a la dictadura. "El miedo a despertar la ira del Gobierno", dice Farrar, "reduce los programas de la Iglesia a labores muy limitadas, como el cuidado de enfermos mentales". En España, la Iglesia católica, dirigida por el cardenal Tarancón, jugó un papel destacado durante la Transición. No es el caso de la Iglesia cubana. Lo que ha ocurrido ahora con la excarcelación de presos me parece vergonzoso. El cardenal Jaime Ortega llamó personalmente a algunos presos de conciencia para ofrecerles la libertad a cambio del destierro. Es algo inaudito que no merece más comentarios. En una ocasión entrevisté al cardenal Jaime Ortega y debo confesar que no me gustó.
Amir Valle: Querido Vicente, como periodista graduado en Cuba conozco la vocación, el talento, la excelente formación y la sólida cultura de muchos de los periodistas cubanos que trabajan en los medios de prensa oficiales en la Isla. Sin embargo, el periodismo que se hace en Cuba es chato, superficial, cojo. Lo cual da la impresión, casi en su totalidad, de que es un periodismo hecho por subnormales incapaces incluso de analizar objetivamente las verdades más visibles de la realidad cubana actual. Sin perder de vista lo anterior, y a partir de tu experiencia profesional, me interesaría saber cómo catalogas tú al periodismo y a esos periodistas cubanos con los cuales, estoy seguro, compartiste con frecuencia durante tu estancia en Cuba.
Querido Amir, yo me inicié en el periodismo durante la dictadura de Franco y la prensa en España era muy diferente de la actual. Había periódicos oficiales (la llamada Prensa del Movimiento) y periódicos de empresas privadas. La formación de los periodistas era la misma, pero el contenido de las informaciones era muy diferente. Aún así, salvo el periódico Arriba (el Granma de Franco), los periodistas españoles no se dirigían al dictador como "Querido gigante", ni decían: "Al paso del líder, hasta el mismísimo Homero hubiera dado la mitad de su vida por escuchar el rumor de los aplausos, consignas, coros de ¡Fidel, Fidel!".
Tampoco decían cosas como que los periodistas tenían que cuidar "las palabras como se cuidan las balas que han de entran en combate", etc, etc, etc. Toda la prensa en Cuba es oficial y su papel es el de altavoz de los "partes de guerra" de una dictadura que se defiende del "imperio". En ese terreno o mejor dicho, en ese campo de batalla, poco pueden hacer los periodistas cuando, además, su supervivencia depende de un salario que les paga el gobierno.
Dicho eso, puedo decirte que he encontrado muy buenos periodistas en Cuba, muy bien formados, muy preparados, de los que he aprendido mucho. Hay excelentes periodistas que no pueden hacer lo que les gustaría y que, cuando esta pesadilla acabe, saldrán a la luz como ya lo están haciendo muchos extraordinarios periodistas independientes, como Yoani Sánchez, Iván García, Laritza Diversent y tantos otros.
Presidente del CDR No. 22 de Playa: Don Vicente, usted que conoce "la pata de que cojea la mesa" castrista y a "la pulga" que intenta gobernar, ¿cuál es su opinión de los próximos cinco años cubanos?
Me gustaría tener una bola de cristal para saber lo que va a ocurrir en Cuba en los próximos cinco años. Me atrevo a decir que Fidel Castro está ya fuera de juego y que las "reformas" de su hermano no van a servir para nada. La gerontocracia cubana se extinguirá de muerte natural y es difícil el alumbramiento de nuevos "salvadores" de la patria, después de que los Castro hayan devorado, como Saturno, a sus propios hijos, los Lage, Pérez Roque, Remirez de Estenoz, etc.
Veremos qué ocurre cuando desaparezcan todas las "gratuidades", como dice Granma y las personas despedidas de sus trabajos no tengan para comer. No creo que en Cuba ocurra como en Túnez o Egipto, aunque cuando el hambre aprieta puede pasar de todo. Sin el "paternalismo" del comunismo ni las ventajas del capitalismo, Cuba se adentra en una tierra de nadie, ni capitalista ni comunista, sino todo lo contrario. Los parches (y lo que está haciendo Raúl Castro es poner parches al balón pinchado o ponchado como dicen en Cuba) nunca solucionan nada.
Lo que hace falta en Cuba es democracia y libertad, y arrojar la dictadura al cubo de basura de la Historia.

Tan lejos de El Cairo

TRIBUNA: YOANI SÁNCHEZ. El País.

YOANI SÁNCHEZ 05/02/2011
La escena duró apenas unos segundos en pantalla, un destello breve que nos cinceló en la retina la imagen de miles de personas protestando en las calles de El Cairo. La situación era descrita por la engolada voz de un locutor cubano, quien sostenía que la crisis del capitalismo había hecho estallar la inconformidad en Egipto y que las diferencias sociales hundían al Gobierno.
La vista aérea de la plaza de Tahrir nos hizo sentir vergüenza de nuestra propia inercia
Apenas mencionó que un ciclo de casi 30 años se estaba desmoronando en solo una semana, justo allá, en un país donde la historia se mide con números de cuatro cifras, se acuña en trozos del tamaño de milenios. La alusión entre nosotros a la prolongada estancia en el poder de Hosni Mubarak fue -como advierte el refranero popular- mencionar "la soga en casa del ahorcado", insinuar que en nuestro propio patio un autoritarismo de cinco décadas también ha excedido su fecha de caducidad. Tal vez para evitarnos esa comparación, los medios estatales se mostraron cautelosos con las noticias que llegaban desde el norte de África. Nos administran a cucharadas la narración de los sucesos, sin hacer hincapié en todos los motivos que empujan a un pueblo a poner límite al mandato personalista de un octogenario.
A pesar del sigilo periodístico, otros fragmentos de lo ocurrido llegaron hasta nosotros a través de las redes alternativas de información, de las perseguidas antenas parabólicas y la escurridiza Internet.
La prudencia oficial no pudo evitar que nos sobrecogiéramos con la vista aérea de la plaza de Tahrir que vibraba al ritmo de la espontaneidad, cuando por estos lares hace muchos años que esa franqueza no se percibe en la sobria y gris plaza de la Revolución. Era inevitable que, al observar la muchedumbre manifestándose con pancartas, termináramos haciéndonos la pregunta que aquel locutor de corbata a rayas quería alejar de nuestras mentes. ¿Por qué en Cuba no ocurre algo así? Si nuestro Gobierno es de más vieja data y el colapso económico se ha convertido en elemento inseparable de nuestros días, ¿qué evita que emprendamos el camino de la protesta cívica, de la presión pacífica en las calles?
Egipto ha venido a sacudirnos en nuestra mansedumbre y el arrojo de otros nos ha enfrentado con nuestra apatía, en esta nación donde el tiempo se mide en efemérides "revolucionarias", se acuña en los folios amarillos de la burocracia.
La teoría de pueblos valientes y pueblos cobardes es, en el menor de los casos, simplista. No hay una genética de la rebeldía como tampoco se puede predecir en qué momento la inconformidad alcanza su punto de ebullición. Esta isla larga y estrecha ha nutrido desde 1959 las especulaciones, las barajas de copa y espada, los tableros de Ifá y hasta los cuartetos rimados, de analistas, cartománticos, babalaos y profetas. Ante estos augurios de un futuro que no acaba de llegar, millones de cubanos han resumido su actitud cívica en un vocablo moroso: esperar.
Acarician el espejismo de la solución rápida, de acostarse un día en un Estado sin derechos y levantarse al otro en una Cuba democrática. Cuando el tiempo de aguardar se prolonga más allá de lo previsto, muchos deciden conjugar el verbo emigrar u optan por las breves y lacónicas sílabas de "callar".
Pero lanzarse a las plazas no, pues ese asfalto retinto de las avenidas pertenece -y así nos dicen desde pequeños- a los revolucionarios, a Fidel Castro y al Partido Comunista. Nos han hecho creer que protestar en público contra los despidos masivos, el alto coste de la vida o para exigir la renuncia de un Gabinete son gestas que emprenden otros, acciones que solo son posibles fuera de nuestras fronteras nacionales.
Nos han quitado las calles, nuestras calles.
En aras de impedir que una multitud tome las aceras y grite al unísono ¡qué se vaya el presidente, qué se vaya!, activan los mecanismos ocultos del control, los resortes del miedo. El engranaje de la vigilancia que no conoce de crisis económica ni de recortes se cierne constantemente sobre nosotros.
Ahora mismo está en vilo, ajustando sus agentes, sus autos, sus leyes, para evitar el contagio que puede venir desde el Este. Pues aunque El Cairo queda muy lejos, hay demasiadas analogías entre los cubanos y esos rostros que vimos reunidos en la marcha de un millón. Ellos gritaban contra Mubarak, pero del lado de acá de la pantalla muchos sentimos que nos emplazaban a nosotros, que nos hacían sentir avergonzados de nuestra inercia.
Yoani Sánchez es periodista cubana y autora del blog Generación Y. En 2008 fue galardonada con el Premio Ortega y Gasset de periodismo. © Yoani Sánchez / bgagency-Milán

jueves, 17 de febrero de 2011

Nuevas Tecnologías

Diario De Cuba
Nuevas Tecnologías
La lógica torcida del policía cibernético
Carlos Alberto Montaner | Miami | 04-02-2011 - 11:33 am.
Un video filtrado muestra cómo piensan los defensores de la censura y del inmovilismo.
Esta nota termina con el link a un video. Vale la pena verlo. Se trata de un joven oficial del Ministerio del Interior (MININT), especialista en guerra cibernética, que durante una hora les explica a unos militares y a otros "compañeros" cómo los "contrarrevolucionarios", de la mano de Estados Unidos, utilizan las nuevas tecnologías para tratar de desestabilizar a la revolución y cambiar el sistema comunista. Su enemigo principal es Yoani Sánchez y dice sobre ella cosas tan peregrinas como que los premios en metálico que ha recibido o las distinciones periodísticas y académicas que le han otorgado han sido orquestados por Estados Unidos, que así "blanquea" el dinero asignado a esta valiente bloguera.
Yoani no es la única enemiga. Se refiere al blog Penúltimos Días y alude a Ernesto Hernández Busto, ataca a Raíces de Esperanza, percibe al cantante Juanes como un adversario coludido con Raíces de Esperanza, asegura que convirtieron el concierto en una derrota para la contrarrevolución y revela que el gobierno cubano ha desplegado en el campo de batalla virtual a más de mil periodistas.
Durante toda la charla asume que está en una guerra y recurre constantemente a la jerga militar. Para él la estrategia de Estados Unidos es obvia: la oposición convencional crea artificialmente los conflictos y los comunicadores tipo Yoani y el resto de los blogueros difunden la información con el objeto de generar el caos. Como prueba de la racionalidad de su planteamiento muestra la información pública (y publicada) del dinero destinado por Washington para promocionar la democracia en Cuba: laptops, teléfonos, viajeros, adiestramiento y acceso a Internet por vía satelital que no puede controlar el gobierno.
Lo interesante de la charla es que este policía de Internet no es capaz de examinar las premisas básicas sobre las que se asienta su planteamiento. ¿Qué defiende y para qué lo defiende?
Como los perros de presa, los toros de lidia y los gallos de pelea, el policía ataca, pero no se cuestiona por qué lo hace o cuáles son las razones de sus adversarios para tratar de cambiar un sistema tan escandalosamente fracasado. Por supuesto que Yoani Sánchez, Oswaldo Payá o las Damas de Blanco quieren cambiar el sistema por otro que funcione mejor. ¿Cuál? El que le da sentido y forma a las 30 sociedades más ricas y felices del planeta. Quieren que Cuba se parezca a Holanda, a España, a Canadá, a Estados Unidos, incluso a Costa Rica o Chile (ya hay más de 20.000 cubanos viviendo en Chile). Quieren que Cuba se asemeje a esos países en los que los cubanos desean vivir y hacia los que escapan cada vez que pueden.
Tampoco se detiene a pensar que el problema no puede estar en que un país suministra medios de comunicación para que otra sociedad difunda informaciones y exprese sus frustraciones, lo que habría que agradecer, sino en un sistema consagrado a impedir que las personas se informen y, si lo creen prudente, se quejen. ¿Advierte este oficial del MININT que su verdadero trabajo es cerrar ventanas, colocar alambradas, arrancar antenas, censurar libros, impedir que las personas se informen libremente y expresen sus opiniones? ¿Sabe que todo el sistema político cubano tiene como objetivo principal el miserable propósito de impedir que las personas se reúnan libremente, intercambien libremente, se asocien libremente? ¿Y por qué? Porque ya todas las opiniones trascendentes y veraces han sido reveladas por medio de la palabra sagrada de los hermanos Castro. Porque ya todos los cauces participativos han sido segregados por la revolución. ¿Cómo no se muere de verguenza defendiendo semejante adefesio moral?
Este gendarme cibernético no se da cuenta de que el pecado no está en que Estados Unidos intente subvertir el orden en Cuba, algo perfectamente predecible tratándose de un país enemigo al que el gobierno cubano ha tratado de perjudicar incesantemente desde 1959, lo que motivó, entre otras cosas, un embargo parcial que va a cumplir medio siglo, sino en que ese orden decidido por los hermanos Castro hace cincuenta años, que ni siquiera los comunistas pueden cambiar, como se ve en el Congreso de abril próximo, donde ya están cocinadas todas las recetas, ha generado una forma de convivencia que hace terriblemente desdichados a los cubanos. Ése es el problema.
¿Para qué quiere silenciar o aplastar a Yoani Sánchez este policía del espacio virtual? ¿Para que nada cambie y continúen la miseria, la improductividad, la falta de libertades, el deterioro creciente de las ciudades, la desilusión de los jóvenes, la tragedia de los balseros, la represión típica de las dictaduras comunistas de partido único, palo y tentetieso?
Ante esto: ¿son más patriotas los blogueros y los demócratas de la oposición que aceptan la ayuda de Estados Unidos, de España o de Suecia, de cualquiera que desee echar una mano para tratar de cambiar una situación injusta y fallida en la que ya se han consumido tres generaciones de cubanos, o los policías obcecados que dedican todo su esfuerzo a mantener ese status quo fallido? ¿Qué virtud hay en insistir tozudamente en el error?
Ahora vea con calma el video de marras. Vale la pena: es una obra maestra de irracionalidad y ceguera.

Los rostros de los “Hombres sin rostros”


Los rostros de los “Hombres sin rostros” (CE)
Este es un libro con un origen muy especial: fue escrito en una celda de aislamiento de la prisión Kilo 8, en Camagüey
Abel German, Valencia | 03/02/2011
Hace algunas semanas recordé —a propósito de la redacción de una reseña— aquel sueño en el que Jorge Luis Borges recibía de un hombre sin rostro la memoria personal de Shakespeare. Entonces quise aludir a la autonomía que el novelista (despojándose de su rostro; es decir: de sus creencias, de su modo de ser el yo que es) debe conferir a sus criaturas. Hoy retomo esa imagen, pero lo hago en un sentido diferente, si no opuesto. Es decir, no tanto como metáfora —que también es—, sino como descripción objetiva de una circunstancia.
Y es que me referiré, no a una novela —como en aquella ocasión—, sino a un poemario. O sea, a una obra que, por su género, debe de tener una relación distinta con su autor. Se trata de Hombres sin rostros, de Ricardo González Alfonso, publicado por la editorial Sepha, España, en 2005. Un libro además con una “biografía” muy especial.
Fue escrito en la clandestinidad de una celda de aislamiento en la prisión Kilo 8, en la provincia cubana de Camagüey, donde su autor había sido confinado por sus actividades en el periodismo independiente, y donde no podía ver a los compañeros de condena. Estos eran solo voces, palabras, ruidos a través de las paredes. Eran “como hombres sin rostros”. Él mismo lo era.
Hay que imaginarse pues al poeta y periodista en su celda tapiada, inclinado, mientras escribía a escondidas con una caligrafía casi ininteligible. Hay que imaginarse cómo hacía para ocultar las “balitas” de papel en sus zapatos cuando tenía que salir de la celda para la requisa en la que los carceleros buscaban objetos prohibidos (entre ellos textos como éste). Hay que imaginarse cómo abría con cuidado, para no dañar el cierre, una cajetilla de cigarrillos, y cómo vaciaba la picadura y rellenaba cada cigarrillo con los poemas. Y luego hay que imaginar cómo pegaba la cajetilla con idéntica meticulosidad. Hay que imaginarlo en esa labor de miniaturización, arriesgándose para salvar los versos de la cárcel. Y luego hay que imaginar a su esposa Álida Viso en las espaciadas visitas, frágil, seguramente con miedo, cuando extraía de la prisión esa valiosa cajetilla. Después hay que imaginársela descifrando la casi criptográfica caligrafía; pasando en limpio cada poema; ordenando el manuscrito. Y después hay que imaginar sus esfuerzos por burlar los controles de la otra prisión (la gran prisión) que es Cuba, para sacarlo del país.
Hay que imaginarse todo eso para comprender cómo se confunden las biografías de estos versos y de las personas que lucharon por ellos. Es, sí, lo que suele ocurrir. Pero en este caso esas biografías (la del poeta, la de su esposa y la del poemario) desbordan el significado propio para convertirse en una alegoría: Representan la lucha pacífica de los cubanos por la libertad. Y todo en oposición a Ortega y Gasset[1], que aconsejaba separar la “vida intelectual” de lo que él llama la vida viviente. Porque al final —y éste es un buen ejemplo— se es un todo.
Pero hablemos del libro. Es un poemario con prólogo y con epílogo. Mas el prólogo no es un prólogo al uso. Su autor es Esteban Beltrán, director de la Sección Española de Amnistía Internacional, y consiste en un alegato por la liberación del poeta y del resto de los presos de conciencia cubanos. Tampoco lo es el epílogo. Lo escribió su esposa Álida Viso y se trata de un breve informe sobre el estado de salud del poeta, entonces muy enfermo.
Por tanto ambos (el prólogo y el epílogo) hablan de la situación del autor, no de sus poemas. Y se entiende. En circunstancias tan especialmente dramáticas es normal que importe más el poeta en riesgo que su libro. Espero que estas acotaciones ayuden a subsanar —aunque con seis años de retraso—, esa comprensible carencia.
Hombres sin rostros consta de cuarenta y tres poemas, y cada uno funciona como un capítulo o una ventana que se abre a diferentes momentos del presidio. Asistimos, entre otros sucesos, a su detención; entramos en su celda; compartimos su aislamiento; vemos y juzgamos a sus carceleros; asistimos a las requisas de su celda; compartimos su soledad; oímos cómo un reo sufre una golpiza; sufrimos sus noches de preso; nos duele la vista por esa luz perenne que durante tres meses le quemó los ojos; sufrimos alguno de sus abatimientos; asistimos a la triste intimidad del recluso; disfrutamos sus modestas alegrías; compartimos sus visitas; y sentimos un escalofrío la noche que compartió con el joven que fusilaron al amanecer.
Es, pues, como todo buen libro de poemas, una especie de dietario que refiere (y documenta) aquello que, como reacción al medio, sucede en el interior del sujeto que escribe. Es la realidad trascendida, previamente tamizada por los sentidos y por los sentimientos. La realidad convertida en palabra: el hecho humano por excelencia. Porque siempre que se habla de poesía, hay que hablar forzosamente, y en primer lugar, de idioma. De cómo —con cuánto acierto o desacierto— el poeta ha elegido y organizado las palabras, y de qué imágenes ha logrado para que el discurso poético y el mundo que lo motivó adquieran sentido en la conciencia del lector.
Y eso (entregar esas claves y disponer con ellas ese discurso) Ricardo González lo ha hecho muy bien.
Hay versos realmente memorables que lo demuestran. En ellos se apoya el conjunto hasta trasladarnos a su inquietante final: De retorno/ a los confines del espanto/ siento/ letra a sangre/ toda la cárcel./ Dudo/ de mis dudas/ y amo. (“Después del Apocalipsis”, ps. 67-68.) En el que la duda coexiste angustiosamente con la creencia y activa el indispensable trabajo de conocimiento.
Otros ejemplos:
Dieron la orden./ Me asignaron una cifra/ para descifrarme/ en esa ecuación/ donde uno es ninguno (p. 19).
Y bajo un cielo de hormigón/ iluminado/ por un astro/ de cristal/ yo canto (p. 21).
Solos/. Imaginar la mirada/ el gesto ajeno./ Como ciegos de tanto ver./ Como hombres sin rostros (p. 22).
El reloj de penas/ desgranó el tiempo./ Murió la hora/ de respirar/ la luz./ Nos llegó la celda (p. 28).
Se sacó un ojo/ y alguien impidió/ que se arrancara el otro./ ¿Verá ahora solo/ la mitad de su tragedia? (p.52)
Nacen huérfanas/ las palabras/ del presidio./ Nacen huérfanas/ y homicidas./ Ay de los años sombras/ de los años jerigonzas/ donde yace/ sin paz/ la magia/ tremenda/ del idioma (p.62).
Hay un proverbio árabe que afirma es imposible para el hombre saltar fuera de su sombra. ¿Pero siempre es así? Al leer estos poemas percibimos que no. Al menos no del todo. Ricardo González Alfonso se rebeló contra esa fatalidad. Se buscó a sí mismo en ese, su doble aislamiento (el de la cárcel y el de sí mismo) e intentó no perder su propio rostro; incluso procuró rescatar en lo posible los de otros presos. Y lo logró.
[1] Ideas y creencias, José Ortega y Gasset, 1940.
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Abel German es escritor, poeta y periodista cubano. Ha publicado El día siguiente de mi infancia (Editorial Letras Cubanas); Cubo de Rucbick (Editorial Unión) y Curiosidades (Ediciones Extramuros). Trabajó en la Agencia de prensa independiente “Cuba Press” desde su fundación como editor y articulista, colaborando, entre otros, con Radio Martí, Cuba Free Press, Cubanet y Revista HC de la Fundación Hispano Cubana. Actualmente se encuentra exiliado en España.

Una cucharada de su propia medicina.



La Habana, Cuba, febrero de 2011
Joisy García Martínez.

Aprender a convivir con las tecnologías una premisa de nuevos tiempos.

La censura continúa siendo uno de los problemas neurálgicos de la sociedad en que vivimos, algunos comunicadores en nuestro país no verifican con objetividad los análisis económicos, políticos, sociales y noticiosos que hoy podemos disfrutar en la Internet, unos solo utilizan los blog, twitter y las redes sociales para atacarse mutuamente, complaciendo de esta forma a la vieja nomenclatura, hoy neocomunista.

Por años los ciudadanos hemos sido víctimas de la vigilancia de las autoridades, hoy las nuevas tecnologías no son exclusivas de gobiernos totalitarios del mundo y las mismas proveen de nuevas herramientas al ciudadano común, fortaleciendo el lógico pensamiento de que los ciudadanos somos mayoría y estamos para vigilar a los que nos gobiernan y no al contrario.

Desde mi punto de vista, el nuevo video filtrado en el ciberespacio y que por estos días recorre el mundo, no tiene otro objetivo que el llamado a las trincheras y el parapeto, bochornosamente un empleado de la policía cibernética cubana asegura tener Blogger buenos que aplastaran con la fuerza de la verdad a los malos y asalariados Blogger del imperio, si embargo él recibe una cucharada de su propia medicina, al ser grabado y elevado a la red de redes.

Lo que menos esperaría el Robocop cubano seria que su imagen y todos sus llamados al despojo de los derechos individuales serian vistos por medio mundo, incluida la propia isla caribeña a través de memorias flash y discos.

Con un lenguaje militar intenta hacer un llamado a las trincheras ideológicas mas extremistas, el Robocop conferencista utiliza lenguajes tales como- estrategia contra cuba, entrega de medios informáticos novedosos, lo ultimo en tecnología satelital y la palabra enemigo es repetida numerosamente, entre otras pone en la mirilla de la llamada seguridad del estado a los sencillísimos cacharreros de la informática de nuestros barrios.

Me pregunto ¿por qué querrían silenciar a los ciudadanos, si estas tecnologías solo nos muestran un medio civilizado de expresión?

Será posible que a estas alturas del siglo XXI los dirigentes de la revolución le tengan miedo al debate limpio y justo de la más democrática y revolucionaria tecnología de todos los tiempos.
joisygarcia@gmail.com


miércoles, 16 de febrero de 2011

S O S

A la opinión pública nacional e internacional

Mi nombre es Raúl Borges Álvarez, soy el padre del prisionero político Ernesto Borges Pérez, quien lleva 5 días en huelga de hambre y sed y el Gobierno Cubano lo ha desaparecido, negándonos a los familiares el lugar para donde se lo han llevado y toda información sobre su real estado de salud actual . Ernesto se plantó en huelga de hambre el sábado 5 de febrero por la tarde en demanda de la liberación de los 10 presos de conciencia de los 75, a los cuales el Gobierno Cubano se comprometió a poner en libertad desde el 8 de noviembre de 2010. también mi hijo exige que sea liberado el contratista norteamericano Alan Gross a quien se le solicitó una sanción de 20 años de privación de libertad por entregar medios de comunicaciones a la sociedad Judía.

Es por eso que hacemos un llamado de auxilio urgente a la iglesia y a todas las instituciones de la comunidad y opinión pública internacional para que se pronuncien y salven la vida de mi hijo, quien es además el vicepresidente del Partido por la Unidad Democrática Cristiana de Cuba. Este prisionero lleva 13 años de cárcel extinguiendo una sanción de 30 años por un delito de espionaje en el área especial de la prisión de alta seguridad de Guanajay en la provincia de Artemisa.

Mi hijo padece de 8 enfermedades crónicas adquiridas todas en la prisión: asma Bronquial Crónica, gastritis, laringitis, dermatitis crónica seborreica, hemorroides, sacrolumbalgia con dos vértebras deformadas, inflamación en el colon, inflamación en el pecho e Hipertensión arterial.

Mi hijo Ernesto Borges Pérez tiene 44 años de edad, es abogado, pertenece a la Corriente de Abogados Agramontistas y al Consejo de Relatores de Derechos Humanos de Cuba. Reside en calle 25 # 571, apto 702, séptimo piso, e/ H y G, Vedado, municipio Plaza, Ciudad Habana, Cuba. Con teléfono 07 830 27 46 y móvil 05 267 94 29.

Les agradece de antemano Raúl Borges Pérez.

A la opinión pública nacional e internacional

Mi nombre es Raúl Borges Álvarez, soy el padre del prisionero político Ernesto Borges Pérez, quien lleva 5 días en huelga de hambre y sed y el Gobierno Cubano lo ha desaparecido, negándonos a los familiares el lugar para donde se lo han llevado y toda información sobre su real estado de salud actual . Ernesto se plantó en huelga de hambre el sábado 5 de febrero por la tarde en demanda de la liberación de los 10 presos de conciencia de los 75, a los cuales el Gobierno Cubano se comprometió a poner en libertad desde el 8 de noviembre de 2010. también mi hijo exige que sea liberado el contratista norteamericano Alan Gross a quien se le solicitó una sanción de 20 años de privación de libertad por entregar medios de comunicaciones a la sociedad Judía.

Es por eso que hacemos un llamado de auxilio urgente a la iglesia y a todas las instituciones de la comunidad y opinión pública internacional para que se pronuncien y salven la vida de mi hijo, quien es además el vicepresidente del Partido por la Unidad Democrática Cristiana de Cuba. Este prisionero lleva 13 años de cárcel extinguiendo una sanción de 30 años por un delito de espionaje en el área especial de la prisión de alta seguridad de Guanajay en la provincia de Artemisa.

Mi hijo padece de 8 enfermedades crónicas adquiridas todas en la prisión: asma Bronquial Crónica, gastritis, laringitis, dermatitis crónica seborreica, hemorroides, sacrolumbalgia con dos vértebras deformadas, inflamación en el colon, inflamación en el pecho e Hipertensión arterial.

Mi hijo Ernesto Borges Pérez tiene 44 años de edad, es abogado, pertenece a la Corriente de Abogados Agramontistas y al Consejo de Relatores de Derechos Humanos de Cuba. Reside en calle 25 # 571, apto 702, séptimo piso, e/ H y G, Vedado, municipio Plaza, Ciudad Habana, Cuba. Con teléfono 07 830 27 46 y móvil 05 267 94 29.

Les agradece de antemano Raúl Borges Pérez.

Reflexiones sobre la cobertura de Egipto

Adrián Fernández | 2011-02-15, 13:15
Los sucesos de Egipto que terminaron con la salida del poder del presidente Hosni Mubarak acapararon por casi 20 días la atención mundial, registraron en términos periodísticos algunas novedades importantes y por otro lado reafirmaron tendencias que ya se veían en otras coberturas anteriores de eventos de tal magnitud.

Al igual que otras grandes noticias internacionales recientes, fueron muy pocos los medios de países latinoamericanos que enviaron a sus propios periodistas a Egipto, y los pocos que fueron lo hicieron relativamente tarde cuando los acontecimientos llevaban ya varios días.
Las distancias y los costos de este tipo de coberturas muchas veces ayudan a que los medios latinoamericanos confíen exclusivamente en agencias o cadenas internacionales de noticias para informar a su público sobre hechos como los de Egipto.

A medida que se desarrollaba el drama en las calles de El Cairo, periódicos como el New York Times de Estados Unidos o The Guardian de Gran Bretaña y cadenas como la CNN y la BBC aumentaban también los recursos destinados a cubrirlo, pero el gran descubrimiento, al menos para los estadounidenses, fue que el gran "ganador" entre todos los medios ha sido el canal de televisión satelital Al-Jazeera en inglés.

El canal de televisión qatarí es visto por amplios sectores de Estados Unidos como vocero del radicalimso islámico, especialmente después de que el ex secretario de Defensa Donald Rumsfeld describiera a su cobertura de la guerra en Irak como "perversa, inexacta e inexcusable" en 2006.

Sin embargo, buena parte de la prensa estadounidense, especialmente los noticieros de televisión, utilizaron a Al-Jazeera como fuente y lo citaban a cada momento durante los sucesos de Egipto.
Se dice que en la Casa Blanca siguieron de cerca las protestas de los egipcios sintonizando CNN y en otro televisor Al-Jazeera.
Según se ha informado, miles de estadounidenses pidieron a sus empresas de cable que comienzen a transmitir la versión en inglés del canal árabe. Actualmente Al-Jazeera solo se puede ver en tres ciudades estadounidenses: Washington D.C., Burlington en el estado de Vermont y Toledo en Ohio.

Por otro lado, mucho se ha hablado sobre el papel que jugó internet y sobre todo las redes sociales en la organización de las manifestaciones antigubernamentales y algo de cierto ha de haber en todo eso ya que en un momento el gobierno se sintió acorralado e interrumpió la transmisión de los canales de noticias por satélite y suspendió el servicio de internet.

Mientras que no se puede medir a ciencia cierta en cuánto contribuyeron Facebook y Twitter en la preparación de las protestas, si podemos decir que por primera vez en un acontecimiento de importancia internacional hubo una interactuación directa entre los protagonistas de la noticia y los periodistas y medios que la cubrían, especialmente en cuanto a correcciones o precisiones se refiere, haciendo los primeros de una especie de "editores online" de los segundos.

Me explico; por primera vez los blogs y tweets de los manifestantes influyeron de forma directa en la manera en que las grandes cadenas o agencias cubrieron la noticia.
De acuerdo al New York Times, después que un participante en la plaza Tahrir twiteara que la situación allí podía ser descripta como un levantamiento o una revuelta, CNN cambió la cintilla con el titular de "Caos en Egipto" a "Levantamiento en Egipto".

Cuando los matones enviados por el gobierno comenzaron a atacar a los manifestantes, los primeros titulares de algunas cadenas señalaban "las protestas se tornan violentas", mientras que a los ataques unilaterales en un principio se los llamó "enfrentamientos" entre grupos.
Pero tales caracterizaciones fueron corregidas rápidamente gracias a las aportaciones y precisiones de gente común desde sus páginas de Facebook o Twitter y de bloggeros. Y las cadenas esta vez, la mayoría de las veces les hicieron caso.

jueves, 10 de febrero de 2011

Los límites del socialismo.

Miriam Celaya.| La Habana| 31-01-2011 - 2:00 am. DDC
Las reformas están llenas de trabas. El gobierno se mueve entre la necesidad de paliar la crisis y el temor a perder el control.
En las últimas semanas de 2010 y las primeras de 2011, muchos cubanos han convertido sus portales, jardines y garajes en cafeterías-timbiriches. También proliferan los pequeños restaurantes familiares conocidos como "paladares". El entusiasmo inicial con que la gente ha acogido la "apertura" oficial de reformas, dirigidas —al menos según las autoridades— a una "renovación del modelo" socialista, demuestra la naturaleza emprendedora de los ciudadanos, en abierto contraste con el conservadurismo del gobierno.
El igualitarismo ramplón, rezago del viejo discurso de justicia social que nos homologó en la pobreza y que mutiló la iniciativa individual, está siendo desmontado a regañadientes por sus propios creadores. El catecismo de la escolástica revolucionaria, con sus componentes morales de sacrificio y austeridad como valores supremos de pureza, pasa de moda.
La redefinición de las estrategias y el abandono de la economía estrictamente centralizada por parte del gobierno, trae implícito el reconocimiento del fracaso del modelo seguido hasta ahora. Las nuevas medidas, contrarias a las pautas político-ideológicas establecidas durante décadas, y aunque imperfectas, atemporales y casi tan obsoletas como el sistema mismo, propician unas iniciativas individuales que a la larga podrían contribuir a quebrar el inmovilismo social.
Trabas
Entre tanto, el gobierno impone trabas a sus propias reformas, acotando de manera absurda las capacidades productivas de la gente. Basta detenerse en algunas de estas acotaciones para descubrir las contradicciones entre la necesidad de paliar la crisis y el temor por parte de los gobernantes a perder el control. El riesgo es tangible: un individuo que se independiza del Estado deja de ser esclavo para convertirse en ciudadano. Los dictadores temen el poder de los ciudadanos. Y aquí empieza el sistema de frenos tecnocráticos, tan ineficaz como insostenible.
En un restaurante familiar, por ejemplo, se permite un máximo de veinte sillas. Esta disposición está encaminada a evitar "el enriquecimiento" que conduciría al surgimiento de una clase media independiente y no comprometida con el gobierno. Ello supondría el fin del sistema tal como se implantó. El socialismo, pues, comenzaría a desmoronarse a partir de la silla 21.
Esto se comprobó en los restaurantes del Barrio Chino, enmascarados tras el velo de "legalidad" de las diferentes sociedades de ese origen y regentados por activos servidores del régimen —muchos de ellos antiguos (o actuales) miembros de la Seguridad del Estado—, en los que la incontenible acumulación de sillas que obliga a los comensales a estar casi uno sobre otro ha propiciado que allí se esfumara el socialismo de los Castro y en su lugar se haya venido entronizando un capitalismo feroz.
Otro control inaudito es el establecimiento de impuestos fijos en lugar de implementar un sistema que grave sobre los ingresos. En el caso de la renta de habitaciones, el propietario de la vivienda debe abonar una cantidad fija cada mes, con independencia de que tenga o no huéspedes. Tomando en cuenta que toda la inversión, los riesgos y el trabajo corren por cuenta de los particulares sin perjuicio del Estado y sin préstamos bancarios, ¿a qué responde una medida tan leonina? Evidentemente, a evitar que los particulares tengan ganancias "excesivas" que den al traste con el socialismo.
Al parecer, el modelo es más frágil de lo que aparentaba si para sostenerse requiere de un estado de pobreza permanente, lo que explica que Cuba sea el único país en el cual un individuo que invierte su capital y trabaja, debería velar por no enriquecerse.
Desempleo
Un factor de gran importancia en el futuro mediato es la ola de desempleos. Los pequeños negocios familiares y las escasas cooperativas no serán capaces de absorber ni siquiera en un porcentaje representativo la masa crítica de 1 millón 300 mil desempleados del Estado que habrá para 2012. La alta tasa de impuestos, la competencia como componente natural del proceso, la ausencia de un mercado mayorista para los inversores y la paulatina disminución del poder adquisitivo de importantes sectores sociales —muchos de los cuales pierden con sus empleos también las fuentes "alternativas" de ingreso—, irán enrareciendo el panorama social y afectarán a su vez los negocios particulares.
Le guste o no, el gobierno tendrá que modificar las actuales medidas para favorecer el flujo económico al interior de Cuba y prevenir el peligro de tensiones sociales; seguramente, para ello, se verá obligado a mover los límites. Es así que deberá abrir espacio a las libertades ciudadanas e independizar la economía de la ideología. Las medidas gubernamentales han llegado tarde, insuficientes e incompletas, pero pudieran ser la fisura necesaria para un paso importante. Es obvio que la vocación improvisadora del régimen procurará enmendar lentamente y sobre la marcha algunos detalles mínimos, tratando de retener lo más posible su poder; pero quizás ya comienzan a llegar los tiempos en que los cubanos seremos quienes realmente pongan los límites.

Democrata en los linea-mientos.

La Habana, Cuba, febrero de 2011
Joisy García Martínez.

El presidente del ilegal Partido Liberal de la Republica de Cuba y animador del proyecto participativo “La voz del Barrio”, Silvio Benítez Márquez, participa en los debates que en su natal pueblo de Punta Brava realizan las autoridades comunistas.

Los llamados lineamientos de la política económica y social que se discuten a nivel de barrio y centros de trabajo llegan en momentos de tenciones sociales por la escasez de agua en el territorio, esto no fue impedimento para que Silvio, acompañado por varios seguidores hiciera uso del supuesto derecho ciudadano que establece el artículo 63 de la constitución cubana.

Los planteamientos de este elector, según me cuentan vecinos y testigos fueron de carácter inclusivos y llegaron hasta la lógica exigencia de mencionar los derechos de la marginada diáspora.

Las demandas también recogieron puntos como el excesivo régimen tributario impuesto al sector privado, el derecho a viajar libremente hacia cualquier lugar del planeta, el abusivo monto en que se expenden los materiales de la construcción, el derecho de ventas de propiedades y bienes individuales. Para el cierre, con broche de oro, Márquez lanza una de sus ultimas estocadas, la propuesta de modificación de la ley electoral vigente.

Según cuenta el demócrata sus planteamientos no fueron bien recibidos por algunas personas que reniegan los obligatorios y necesarios cambios que con urgencia necesita nuestra nación.

Acción cívica que con total valentía y tolerancia asume este defensor de derechos, él está haciendo historia al lado de los suyos, convulsos momentos que un día dejaremos atrás.
joisygarcia@gmail.com

martes, 1 de febrero de 2011

¿Acoso y sucias trampitas ó violación de la ley?

¿Acoso y sucias trampitas ó violación de la ley?

La Habana, Cuba, enero de 2011

Joisy García Martínez.

Solo hay dos cosas infinitas en el mundo: El universo y la estupidez humana y de la primera no estoy muy seguro.

Albert Eisteín.

Realmente creo tener una inclinación innata en defender lo que algunas personas en el mundo civilizado llamarían sus derechos. Estando completamente convencido y teniendo como testigos a varias personas, he querido lanzar este post para que los Agentes de la Seguridad del Estado de Cuba, que han estado acosando a mi hijo, mi madre y esposa, estén completamente informados de lo que podría traer como consecuencia en un futuro -no muy lejano- sus  actos impunes hasta el momento.

Reproduzco un párrafo que en especial me gustó de estas resoluciones, y se ajusta a la definición de lo sucedido:

1. A los efectos de la presente Declaración, se entenderá por tortura todo acto por el cual un funcionario público, u otra persona a instigación suya, inflija intencionalmente a una persona penas o sufrimientos graves, ya sean físicos o mentales, con el fin de obtener de ella o de un tercero información o una confesión, de castigarla por un acto que haya cometido o se sospeche que ha cometido, o de intimidar a esa persona o a otras. No se considerarán tortura las penas o sufrimientos que sean consecuencia únicamente de la privación legítima de la libertad, o sean inherentes o incidentales a ésta, en la medida en que estén en consonancia con las Reglas Mínimas para el Tratamiento de los Reclusos.

Informarme e informar a todos los que de una u otra manera tengan acceso a este blog es mi objetivo, espero que estas dos resoluciones adoptadas por la Asamblea General de las Naciones Unidas, contribuyan al ejercicio educativo que tanto nos hace falta a los cubanos, ya que lo verdaderamente penoso, es haber sido dirigidos, mas de 50 años por un supuesto abogado que permite la violación de sus propias leyes.

Código de conducta para funcionarios encargados de hacer cumplir la ley

Adoptado por la Asamblea General en su resolución 34/169, de 17 de diciembre de 1979

Artículo 1

Los funcionarios encargados de hacer cumplir la ley cumplirán en todo momento los deberes que les impone la ley, sirviendo a su comunidad y protegiendo a todas las personas contra actos ilegales, en consonancia con el alto grado de responsabilidad exigido por su profesión.
Comentario:
a) La expresión "funcionarios encargados de hacer cumplir la ley" incluye a todos los agentes de la ley, ya sean nombrados o elegidos, que ejercen funciones de policía, especialmente las facultades de arresto o detención.
b) En los países en que ejercen las funciones de policía autoridades militares, ya sean uniformadas o no, o fuerzas de seguridad del Estado, se considerará que la definición de funcionarios encargados de hacer cumplir la ley comprende a los funcionarios de esos servicios.
c) En el servicio a la comunidad se procura incluir especialmente la prestación de servicios de asistencia a los miembros de la comunidad que, por razones personales, económicas, sociales o emergencias de otra índole, necesitan ayuda inmediata.
d) Esta disposición obedece al propósito de abarcar no solamente todos los actos violentos, de depredación y nocivos, sino también toda la gama de prohibiciones previstas en la legislación penal. Se extiende, además, a la conducta de personas que no pueden incurrir en responsabilidad penal.

Artículo 2

En el desempeño de sus tareas, los funcionarios encargados de hacer cumplir la ley respetarán y protegerán la dignidad humana y mantendrán y defenderán los derechos humanos de todas las personas.
Comentario:
a) Los derechos humanos de que se trata están determinados y protegidos por el derecho nacional y el internacional. Entre los instrumentos internacionales pertinentes están la Declaración Universal de Derechos Humanos, el Pacto Internacional de Derechos Civiles y Políticos, la Declaración sobre la Protección de todas las Personas contra la Tortura y Otros Tratos o Penas Crueles, Inhumanos o Degradantes, la Declaración de las Naciones Unidas sobre la eliminación de todas las formas de discriminación racial, la Convención Internacional sobre la Eliminación de Todas las Formas de Discriminación Racial, la Convención Internacional sobre la Represión y el Castigo del Crimen de Apartheid, la Convención para la Prevención y la Sanción del Delito de Genocidio, las Reglas Mínimas para el Tratamiento de los Reclusos y la Convención de Viena sobre relaciones consulares.
b) En los comentarios de los distintos países sobre esta disposición deben indicarse las disposiciones regionales o nacionales que determinen y protejan esos derechos.

Artículo 3

Los funcionarios encargados de hacer cumplir la ley podrán usar la fuerza sólo cuando sea estrictamente necesario y en la medida que lo requiera el desempeño de sus tareas.
Comentario:
a) En esta disposición se subraya que el uso de la fuerza por los funcionarios encargados de hacer cumplir la ley debe ser excepcional; si bien implica que los funcionarios encargados de hacer cumplir la ley pueden ser autorizados a usar la fuerza en la medida en que razonablemente sea necesario, según las circunstancias para la prevención de un delito, para efectuar la detención legal de delincuentes o de presuntos delincuentes o para ayudar a efectuarla, no podrá usarse la fuerza en la medida en que exceda estos límites.
b) El derecho nacional restringe ordinariamente el uso de la fuerza por los funcionarios encargados de hacer cumplir la ley, de conformidad con un principio de proporcionalidad. Debe entenderse que esos principios nacionales de proporcionalidad han de ser respetados en la interpretación de esta disposición. En ningún caso debe interpretarse que esta disposición autoriza el uso de un grado de fuerza desproporcionado al objeto legítimo que se ha de lograr.
c) El uso de armas de fuego se considera una medida externa. Deberá hacerse todo lo posible por excluir el uso de armas de fuego, especialmente contra niños. En general, no deberán emplearse armas de fuego excepto cuando un presunto delincuente ofrezca resistencia armada o ponga en peligro, de algún otro modo, la vida de otras personas y no pueda reducirse o detenerse al presunto delincuente aplicando medidas menos extremas. En todo caso en que se dispare un arma de fuego, deberá informarse inmediatamente a las autoridades competentes.

Artículo 4

Las cuestiones de carácter confidencial de que tengan conocimiento los funcionarios encargados de hacer cumplir la ley se mantendrán en secreto, a menos que el cumplimiento del deber o las necesidades de la justicia exijan estrictamente lo contrario.
Comentario:
Por la naturaleza de sus funciones, los funcionarios encargados de hacer cumplir la ley obtienen información que puede referirse a la vida privada de las personas o redundar en perjuicio de los intereses, especialmente la reputación, de otros. Se tendrá gran cuidado en la protección y el uso de tal información, que sólo debe revelarse en cumplimiento del deber o para atender las necesidades de la justicia. Toda revelación de tal información con otros fines es totalmente impropia.

Artículo 5

Ningún funcionario encargado de hacer cumplir la ley podrá infligir, instigar o tolerar ningún acto de tortura u otros tratos o penas crueles, inhumanos o degradantes, ni invocar la orden de un superior o circunstancias especiales, como estado de guerra o amenaza de guerra, amenaza a la seguridad nacional, inestabilidad política interna, o cualquier otra emergencia pública, como justificación de la tortura u otros tratos o penas crueles, inhumanos o degradantes.
Comentario:
a) Esta prohibición dimana de la Declaración sobre la Protección de Todas las Personas contra la Tortura y Otros Tratos o Penas Crueles, Inhumanos o Degradantes, aprobada por la Asamblea General, y en la que se estipula que:
"[Todo acto de esa naturaleza], constituye una ofensa a la dignidad humana y será condenado como violación de los propósitos de la Carta de las Naciones Unidas y de los derechos humanos y libertades fundamentales proclamados en la Declaración Universal de Derechos Humanos [y otros instrumentos internacionales de derechos humanos]."
b) En la Declaración se define la tortura de la siguiente manera:
"[...] se entenderá por tortura todo acto por el cual el funcionario público, u otra persona a instigación suya, inflija intencionalmente a una persona penas o sufrimientos graves, ya sean físicos o mentales, con el fin de obtener de ella o de un tercero información o una confesión, de castigarla por un acto que haya cometido o se sospeche que haya cometido, o de intimidar a esa persona o a otras. No se considerarán torturas las penas o sufrimientos que sean consecuencia únicamente de la privación legítima de la libertad, o sean inherentes o incidentales a ésta, en la medida en que estén en consonancia con las Reglas Mínimas para el Tratamiento de los Reclusos."
c) El término "tratos o penas crueles, inhumanos o degradantes" no ha sido definido por la Asamblea General, pero deberá interpretarse que extiende la protección más amplia posible contra todo abuso, sea físico o mental.

Artículo 6

Los funcionarios encargados de hacer cumplir la ley asegurarán la plena protección de la salud de las personas bajo su custodia y, en particular, tomarán medidas inmediatas para proporcionar atención médica cuando se precise.
Comentario:
a) La "atención médica", que se refiere a los servicios que presta cualquier tipo de personal médico, incluidos los médicos en ejercicio inscritos en el colegio respectivo y el personal paramédico, se proporcionará cuando se necesite o solicite.
b) Si bien es probable que el personal médico esté adscrito a los órganos de cumplimiento de la ley, los funcionarios encargados de hacer cumplir la ley deben tener en cuenta la opinión de ese personal cuando recomiende que se dé a la persona en custodia el tratamiento apropiado por medio de personal médico no adscrito a los órganos de cumplimiento de la ley o en consulta con él.
c) Se entiende que los funcionarios encargados de hacer cumplir la ley proporcionarán también atención médica a las víctimas de una violación de la ley o de un accidente ocurrido en el curso de una violación de la ley.

Artículo 7

Los funcionarios encargados de hacer cumplir la ley no cometerán ningún acto de corrupción. También se opondrán rigurosamente a todos los actos de esa índole y los combatirán.
Comentario:
a) Cualquier acto de corrupción, lo mismo que cualquier otro abuso de autoridad, es incompatible con la profesión de funcionario encargado de hacer cumplir la ley. Debe aplicarse la ley con todo rigor a cualquier funcionario encargado de hacerla cumplir que cometa un acto de corrupción, ya que los gobiernos no pueden pretender hacer cumplir la ley a sus ciudadanos si no pueden, o no quieren, aplicarla contra sus propios agentes y en sus propios organismos.
b) Si bien la definición de corrupción deberá estar sujeta al derecho nacional, debe entenderse que abarca tanto la comisión u omisión de un acto por parte del responsable, en el desempeño de sus funciones o con motivo de éstas, en virtud de dádivas, promesas o estímulos, exigidos o aceptados, como la recepción indebida de éstos una vez realizado u omitido el acto.
c) Debe entenderse que la expresión "acto de corrupción" anteriormente mencionada abarca la tentativa de corrupción.

Artículo 8

Los funcionarios encargados de hacer cumplir la ley respetarán la ley y el presente Código. También harán cuanto esté a su alcance por impedir toda violación de ellos y por oponerse rigurosamente a tal violación.
Los funcionarios encargados de hacer cumplir la ley que tengan motivos para creer que se ha producido o va a producirse una violación del presente Código informarán de la cuestión a sus superiores y, si fuere necesario, a cualquier otra autoridad u organismo apropiado que tenga atribuciones de control o correctivas.
Comentario:
a) El presente Código se aplicará en todos los casos en que se haya incorporado a la legislación o la práctica nacionales. Si la legislación o la práctica contienen disposiciones más estrictas que las del presente Código, se aplicarán esas disposiciones más estrictas.
b) El artículo tiene por objeto mantener el equilibrio entre la necesidad de que haya disciplina interna en el organismo del que dependa principalmente la seguridad pública, por una parte, y la de hacer frente a las violaciones de los derechos humanos básicos, por otra. Los funcionarios encargados de hacer cumplir la ley informarán de las violaciones a sus superiores inmediatos y sólo adoptarán otras medidas legítimas sin respetar la escala jerárquica si no se dispone de otras posibilidades de rectificación o si éstas no son eficaces. Se entiende que no se aplicarán sanciones administrativas ni de otro tipo a los funcionarios encargados de hacer cumplir la ley por haber informado de que ha ocurrido o va a ocurrir una violación del presente Código.
c) El término "autoridad u organismo apropiado que tenga atribuciones de control o correctivas" se refiere a toda autoridad o todo organismo existente con arreglo a la legislación nacional, ya forme parte del órgano de cumplimiento de la ley o sea independiente de éste, que tenga facultades estatutarias, consuetudinarias o de otra índole para examinar reclamaciones y denuncias de violaciones dentro del ámbito del presente Código.
d) En algunos países puede considerarse que los medios de información para las masas cumplen funciones de control análogas a las descritas en el inciso c supra. En consecuencia, podría estar justificado que los funcionarios encargados de hacer cumplir la ley, como último recurso y con arreglo a las leyes y costumbres de su país y a las disposiciones del artículo 4 del presente Código, señalaran las violaciones a la atención de la opinión pública a través de los medios de información para las masas.
e) Los funcionarios encargados de hacer cumplir la ley que observen las disposiciones del presente Código merecen el respeto, el apoyo total y la colaboración de la comunidad y del organismo de ejecución de la ley en que prestan sus servicios, así como de los demás funcionarios encargados de hacer cumplir la ley.

La Declaración sobre la Protección de Todas las Personas contra la Tortura
y Otros Tratos o Penas Crueles, Inhumanos o Degradantes

Adoptada por la Asamblea General en su resolución 3452 (XXX), de 9 de diciembre de 1975

Artículo 1

1. A los efectos de la presente Declaración, se entenderá por tortura todo acto por el cual un funcionario público, u otra persona a instigación suya, inflija intencionalmente a una persona penas o sufrimientos graves, ya sean físicos o mentales, con el fin de obtener de ella o de un tercero información o una confesión, de castigarla por un acto que haya cometido o se sospeche que ha cometido, o de intimidar a esa persona o a otras. No se considerarán tortura las penas o sufrimientos que sean consecuencia únicamente de la privación legítima de la libertad, o sean inherentes o incidentales a ésta, en la medida en que estén en consonancia con las Reglas Mínimas para el Tratamiento de los Reclusos.
2. La tortura constituye una forma agravada y deliberada de trato o pena cruel, inhumano o degradante.

Artículo 2

Todo acto de tortura u otro trato o pena cruel, inhumano o degradante constituye una ofensa a la dignidad humana y será condenado como violación de los propósitos de la Carta de las Naciones Unidas y de los derechos humanos y libertades fundamentales proclamados en la Declaración Universal de Derechos Humanos.

Artículo 3

Ningún Estado permitirá o tolerará tortura u otros tratos o penas crueles, inhumanos o degradantes. No podrán invocarse circunstancias excepcionales tales como estado de guerra o amenaza de guerra, inestabilidad política interna o cualquier otra emergencia pública como justificación de la tortura u otros tratos o penas crueles, inhumanos o degradantes.

Artículo 4

Todo Estado tomará, de conformidad con las disposiciones de la presente Declaración, medidas efectivas para impedir que se practiquen dentro de su jurisdicción torturas u otros tratos o penas crueles, inhumanos o degradantes.

Artículo 5

En el adiestramiento de la policía y otros funcionarios públicos responsables de las personas privadas de su libertad, se asegurará que se tenga plenamente en cuenta la prohibición de la tortura u otros tratos o penas crueles, inhumanos o degradantes. Esta prohibición se incluirá asimismo, en su caso, en las normas o instrucciones generales que se publiquen en relación con los deberes y funciones de cualquier encargado de la custodia o trato de dichas personas.

Artículo 6

Todo Estado examinará periódicamente los métodos de interrogatorio y las disposiciones para la custodia y trato de las personas privadas de su libertad en su territorio, a fin de prevenir todo caso de tortura u otros tratos o penas crueles, inhumanos o degradantes.

Artículo 7

Todo Estado asegurará que todos los actos de tortura definidos en el artículo 1 constituyen delitos conforme a la legislación penal. Lo mismo se aplicará a los actos que constituyen participación, complicidad, incitación o tentativa de cometer tortura.

Artículo 8

Toda persona que alegue que ha sido sometida a tortura u otros tratos o penas crueles, inhumanos o degradantes, por un funcionario público o a instigación del mismo, tendrá derecho a que su caso sea examinado imparcialmente por las autoridades competentes del Estado interesado.

Artículo 9

Siempre que haya motivos razonables para creer que se ha cometido un acto de tortura tal como se define en el artículo 1, las autoridades competentes del Estado interesado procederán de oficio y con presteza a una investigación imparcial.

Artículo 10

Si de la investigación a que se refieren los artículos 8 ó 9 se llega a la conclusión de que parece haberse cometido un acto de tortura tal como se define en el artículo 1, se incoará un procedimiento penal contra el supuesto culpable o culpables de conformidad con la legislación nacional. Si se considera fundada una alegación de otras formas de trato o penas crueles, inhumanas o degradantes, el supuesto culpable o culpables serán sometidos a procedimientos penales, disciplinarios u otros procedimientos adecuados.

Artículo 11

Cuando se demuestre que un acto de tortura u otros tratos o penas crueles, inhumanos o degradantes han sido cometidos por un funcionario público o a instigación de éste, se concederá a la víctima reparación e indemnización, de conformidad con la legislación nacional.

Artículo 12

Ninguna declaración que se demuestre que ha sido hecha como resultado de tortura u otros tratos o penas crueles, inhumanos o degradantes podrá ser invocada como prueba contra la persona involucrada ni contra ninguna otra persona en ningún procedimiento

No creo que sea muy técnico o aburrido, más bien educativo para ejercer una verdadera justicia social en nuestra sociedad, apoderarnos del conocimiento de las leyes, un deber social.

¿Cuba es firmante de estas dos resoluciones firmadas en las Naciones Unidas?

Por favor, que alguien me responda, la curiosidad ya me esta matando.

 

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